Cathartes Ediciones
publica el año 2017 una invitación hacia el pueblo de Innsmouth, creado por
Lovecraft, dentro de los mitos de Cthulhu. La invitación es a través del
ingreso a una Orden, a aterrarse con las historias que “corren por cuenta de la
casa” para atraparte y que tu cerebro devore cada historia contenida en “La
Taberna de Innsmouth”. Es la primera publicación de la editorial bajo este
título en formato revista, donde se espera una segunda parte para el presente
año.
El contenido corresponde a
26 microcuentos o microrelatos con autores de distintas nacionalidades, edades
y zonas geográficas de Chile, por lo que veremos una variedad muy rica de
relatos, basados en leyendas o mitos, por lo que bastante de lo que se lea
resultará conocido. Además, cuenta con ilustraciones a cargo de Alex Olivares,
All Gore, Cristián Caro, Angélica Tapia y Luis Naranjo, que entregan una
ambientación perfecta para cada historia.
El eje principal de “La
Taberna de Innsmouth” es, a través de historias de terror, dejar meditando al
lector sobre los horrores que pueden existir a la vuelta de la esquina,
horrores que desconocemos en su naturaleza, pero que sabemos que existen. Es
así como en varios relatos se juega con lo desconocido, incluso entregando una
historia donde uno debe imaginar el desenlace en su mente como se puede ver en
“Turno rotativo”, donde no se sabe qué clase de horror experimenta el
protagonista de la historia, pero es muy evidente lo que provoca en él. El
miedo a la luna llena a través de “El lobizón”. Un alma que pena o la propia
culpa es la que atormenta en “Reapariciones”. Gritos en medio del pacífico en
“En un ocaso”. El horror de debe retratar en la mente del lector con “Echémosle
la culpa al mandinga, dejó pasao` a azufre y ni avisó”. Una historia de
venganza se oculta en “El payaso Kuin Kuin Kuin Kuin”. Alguien o “algo” intenta
poner justicia en el ritual ejercido por los hombres al extraer las plumas de
las gallinas en “Ellos”. Una oscura historia de una abuela se hace realidad en
“El espectro Negro”.
También encontraremos
relatos directos, generando una imagen en la mente del lector, como un negocio
bastante explícito presentado en “Cráneos de placer”. Mitos adaptados por el
escritor, como el “Cuero viejo”. La leyenda de la Paquita durante la Lima
Colonial en “Lo que pasó después del fulbito”. Una niña se dirige al colegio
cuando se encuentra con las cuencas vacías de un rostro calavérico en el “Día
de los difuntos”. Pedro busca un lugar para tomar cervezas, pero la elección de
ese lugar puede ser el equivocado en “Un lugar para descansar”. Una viejecilla
cava una tumba y le comenta al protagonista que es para él en “¿Fue una
pesadilla?”.
En Chinchorro existen
muchas leyendas, algunas horrendas que reaparecen ante un grupo de jóvenes en
“Pesadilla”. La leyenda conocida en tantos países del viejo del saco es
retratada por medio de otra historia de un hombre de similares características
en “El viejito del saco”. La noche buena viene acompañada de horror y
maduración en “El carbón”. Papá Noel le entrega un regalo a Leopoldo Linares,
quien se encuentra preso por robar juguetes de la Navidad en “Un regalo
inesperado”. El horror se oculta para devorar personas en “La bodega de la
escuela”. Una empresa agrícola que evade impuestos, además de abusar de sus
trabajadores, hasta que el horror pone un poco de justicia en “Las siete
cabezas”. Una historia de placer insano en “El palacio”. Un tipo intenta
figurar en como el Chacal de Nahueltoro en “Chacal”. Creencias populares se
mezclan con la muerte en “La piedra con las marcas”. “Tradición familiar” nos
muestra una iniciación para un niño de seis años.
La narrativa no solo es a
través de las palabras, también puede ser representada de manera gráfica, como
la historia del origen del pueblo mapuche en “Ten Ten/Kai Kai” y “Padre
nuestro”, donde nos muestra el horror a través de un cura mientras reza a los
pies de una cruz.
Son microrelatos escritos
con elegancia, que permiten imaginar escenas, como el cuento del payaso, donde
el título hace imaginar sonidos de cuchillos. También permiten recrear
leyendas, crear una visión sobre la desaparición de personas, donde el
provocador de ese terror no necesariamente proviene de monstruos, sino que se
crea la idea de que algo no humano las provoca. Otra cosa que llama la atención
es la transformación del mito creado en torno a Papá Noel, para convertirlo en
una invocación al miedo. También existe en algunos de ellos una crítica social.
Recomiendo este gran
trabajo de Carhartes Ediciones, por su variedad de relatos, porque es perfecta
para apreciar este género literario y además sirve como introducción, para
quienes no conocen, la literatura de terror de nuestro continente. También
sirve para conocer distintos autores y poder conseguir sus otros trabajos literarios
¡Por lo tanto! la tensión está contenida en una gran variedad de historias
presentadas. Solo queda formar parte de las historias, porque esa es la
invitación, ser un creador de las historias junto a sus autores y esperar
sentados en la barra, la segunda parte de "La Taberna de Innsmouth",
que se viene con más terror sobrenatural.
¿Dónde conseguirlo?
En la página de Cathartes
Ediciones:
http://cathartesediciones.blogspot.com/
Reseña de Claudio Soto para La Frontera de los Libros
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